Fuente: Terra.com.co Por: Eduardo Viera Karas
La década recién empezó y ya son grandes las expectativas sobre lo que la tecnología podrá ofrecernos durante los próximos años. Pensando en esto, Bajakí seleccionó seis probables innovaciones que deben cambiar nuestras vidas o marcar la evolución de la humanidad. Conoce qué es lo que puede (o no) revolucionar el futuro.
1. Autos de Google sin conductor
Según datos de la Organización Mundial de Salud publicados en 2011, el transito es responsable por más de un millón de muertes cada año en el mundo. Ahora, debes estar preguntándote: ¿esta estadística es culpa de los conductores o de los automóviles?
Desafortunadamente, el riesgo está más asociado al conductor que a la ingeniería de los autos. Para el bien de la humanidad y para intentar eliminar esta situación, adivina quién resolvió entrar en esta pelea: nadie menos que Google.
Los autos sin conductor ya están siendo probados - y con éxito - desde 2010 en Estados Unidos. Con el nombre de Google Cars, los vehículos andan más de 1500 kilómetros sin ninguna intervención humana y aproximadamente 230 mil kilómetros (lo suficiente para dar casi cinco vueltas alrededor de la Tierra) con eventuales participaciones del conductor.
Todo este recorrido fue hecho de manera segura, gracias a un programa de inteligencia artificial capaz de detectar toda el área alrededor del auto y copiar las decisiones hechas por un ser humano. Irónicamente, el único accidente fue culpa de un conductor de otro auto, que chocó contra el Google Car por atrás cuando este paró en un semáforo.
Según los ingenieros responsables del proyecto, los robots reaccionan más rápido que los humanos, tienen percepción de 360 grados, no les da sueño y tampoco se embriagan. Además, la cámara integrada consigue captar movimientos de peatones, ciclistas o todo lo que esté en el camino, ayudando a que el vehículo esquive de eventuales obstáculos.
A finales de junio de 2011, el Estado de Nevada, en Estados Unidos, fue el primero en reglamentar la circulación de autos con piloto automático y sin conductor ¿ un gran paso para el inicio del comercio de este tipo de automóviles. ¿Será qué en 2020 va a ser común mirar hacia el lado y no ver a nadie en el volante?
En cuanto a Google, en el futuro cada uno tendrá su propio conductor - O casi eso.
2. Construcciones que vuelan
Directo de Australia, entre canguros y koalas, surge una nueva tecnología que promete revolucionar el flujo aéreo. Un globo gigante, en formato de disco, proyectado para transportar hasta 150 toneladas de una sola vez ¿ para tener una idea, el peso soportado sería capaz de mover mansiones, hospitales, estatuas o inclusive una centena de autos.
Inflado con helio (el mismo compuesto usado en dirigibles), el objeto tiene 150 metros de circunferencia y puede llegar hasta los 83 kilómetros por hora, con autonomía para desplazarse hasta dos mil km.
Con la evolución de la tecnología, podría ser posible transportar edificios, teatros y estructuras enteras por el cielo, sin la necesidad de construir o reconstruir nada, una verdadera maravilla para el show business y la construcción civil.
Otra aplicación interesante para Skylifter sería la de ayuda humanitaria. Hoy, un helicóptero consigue cargar 20 toneladas de suplementos, 7,5 veces menos de lo que el globo conseguirá transportar. La diferencia entre el prototipo australiano y los clásicos dirigibles está justamente en la manera que el disco eleva los compartimientos. A través de una grúa y cuerdas externas, se pueden alzar edificios o reservatorios enormes, más o menos de la manera como sucede con un contenedor en un camión.
El área de turismo es otra que debe beneficiarse. Sobrevuelos en la selva amazónica o en un safari africano a bordo de un hotel móvil de lujo con seguridad serían experiencias deseadas por quien pudiera pagar.
Sin embargo, según las expectativas, no los veremos tan temprano. Las primeras pruebas ya fueron realizadas con miniaturas, y Skylifter en tamaño real debe estar listo solamente en 2013.
3. Pantallas estilo pergamino
Este tipo de tecnología aún no llegó al mercado pero no es novedad. Después de la carrera por la pantalla más fina, varias empresas vienen empeñándose en desarrollar pantallas flexibles y más resistentes.
Imagina cuando puedas tomar una televisión de 32 pulgadas, enrollarla y colocarla en la mochila para llevarla hasta la casa de un amigo. Al llegar, sólo deberás desenrollarla, encenderla y disfrutar. Probablemente también estarás conectado a internet y tendrás canales de televisión pagos sin necesitar cables, más práctico imposible.
Esto será posible gracias a la tecnología OLED, que consigue exhibir imágenes de alta calidad en superficies con sólo 0,1 mm de grosor. Claro que algo tan fino no podría ser totalmente rígido. Por este motivo, las pantallas podrán doblarse y enrollarse.
Cómo se puede esperar, monitores de este tipo deben hacer parte de varios dispositivos, como smartphones, tabletas y videojuegos portátiles. Entretanto, otra idea que circula es la de combinar el concepto touchscreen con OLED para recrear páginas impresas - lo que podría sepultar a los periódicos y las revistas.
Hasta 2020, es casi seguro que veremos displays animados en OLED decorando paredes, edificios, tiendas, outdoors, vehículos y en todos los lugares donde la creatividad humana consiga colocarlos...
0 comentarios:
Publicar un comentario