Con cada generación de iPhone, Apple se esfuerza más en mejorar la resistencia y la durabilidad de sus productos, con el iPhone 6s es aún más la intención de Apple a la hora de reforzar estos dispositivos.
Para acallar movimientos como el bendgate (iPhone 6 que se dobla) y demás Apple ha introducido un nuevo tipo de aluminio (aluminio 7000) en la carcasa metálica del iPhone triplicando su resistencia a ser doblegado, con la pantalla sucede lo mismo, el nuevo iPhone posee la pantalla más resistente jamás vista en un iPhone, no es el rumoreado cristal de zafiro pero dados los buenos resultados de los test de caída nos conformamos.
Pero ¿y con el agua?, el iPhone 6 y 6 Plus recordemos aguantaba tan solo 10 segundos bajo el agua antes de apagarse por completo, algo que nos daba muy poco margen de reacción para retirarlos del agua a tiempo, en los iPhone 6 y 6 Plus Apple incluyó en los botones unas protecciones de plástico para mantener el agua a raya (con muy poca efectividad), sin embargo los nuevos iPhone sorprenden en este aspecto, por alguna vía Apple ha conseguido hacer que los nuevos iPhone sean capaces de aguantar más de 1 hora bajo el agua y seguir funcionando perfectamente, todo un record para un smartphone que, recordemos, no es sumergible ni posee ningún tipo de certificación IPX.
Dada la alta resistencia a líquidos de los nuevos iPhone se me pasó por la cabeza el posible uso del procesado de dispositivos electrónicos que ofrece la compañía HZO que permite tener dispositivos electrónicos completamente a prueba de agua y protegidos durante más de 20 años sin ningún tipo de aplicación químico por parte del usuario, se trata de un procesado que ellos realizan sobre los componentes electrónicos antes de ensamblar el dispositivo.
Sin embargo tras ver el siguiente vídeo me ha quedado claro que esto no es así:
Vía actualidadiphone.com
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Geovanny Orjuela
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