Hace tres años, las modelos iban con los cuerpos pintados. Hace dos, mostrando toda su ‘personalidad’. El año pasado, como auténticos ángeles caídos. Y para el 2015… ¡¡¡en pelota picada!!! Para que cortarse si podemos tener una campaña publicitaria ‘como Dios manda’ y con una repercusión de proporciones planetarias. Eso han debido de pensar los publicistas de Lindner, un fabricante polaco de ataúdes, que cada noviembre lanza una ‘bomba’ en forma de calendario.


Esta vez la compañía ha ido un poquito más allá y ha puesto a sus chicas en actitud muy cariñosa con los féretros. Y como si esto no fuera suficiente, les ha adjudicado compañía masculina. La gota que ha colmado el vaso de la iglesia católica que ha calificado el almanaque de “inapropiado”, según publica el diario británico Mirror.

Un portavoz de la Santa Sede en Polonia ha comentado que la muerte de un ser humano “debe ser tratada con solemnidad y no debe mezclarse con el sexo“. Ni que fuera una película porno. Son fotos muy artísticas que adornarían las paredes de cualquier taller de carretera o el vestuario de un parque de fornidos bomberos.

Por su parte, la empresa se ha limitado a decir que “son simples cajas de madera decoradas y que no hay nada sagrado en ellas“. Una razón de peso para pasarse las advertencias de la iglesia por el arco del triunfo.



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