Hay necesidades fisiológicas que cuando sienten la llamada de la naturaleza son casi imposibles de evitar. Eso es lo que debió ocurrirle a un elefante macho de Pilanesberg que no pudo reprimir sus ganas de rascarse aunque fuese contra un coche.

Elefante rascándose con un coche
Elefante rascándose con un coche | Foto: Armand Grobler/Pilanesberg

La escena que tiene esos toques cómicos, increíbles y emocionantes que cualquier momento único requiere fue captada por Armand Grobler, uno de los guías y gerentes del Parque Nacional de Pilanesberg en Sudáfrica. En este pareje los turistas tienen la posibilidad de realizar un safari en coche, pero esta práctica en apariencia normal esconde riesgos si los intrépidos viajeros deciden acercarse demasiado.

Es la segunda vez que ocurre este hecho en el mismo parque. El pasado día 6 de agosto unos turistas fueron soprendidos por un macho de elefante al que le picaba el cuerpo, sí tal y como han leído, ante las ganas de rascarse el 'animalito' decidió frotarse contra el coche en el que los aventureros permanecieron aterrorizados.

El testigo fortuito, Armand Grobler, dice que el elefante se encontraba en una fase must, que al parecer es un estado en la que la testosterona es máxima en el animal. Pese a las impactantes imágenes los turistas no sufrieron daños y después de calmar sus necesidades se alejó del vehículo como si una vez más se hubiese rascado contra el tronco de un árbol.

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